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COMO CUALQUIERA
Como cualquiera tuve mis problemas,
más no sentí el vencimiento,
he tenido el criterio de no lamentarme
como cualquiera.
Llegué a sentir dolor profundo,
a conocer la imprudencia,
conocí el error,
que me hizo llegar a tantas verdades,
levanté mi fe, mis sueños y tristezas,
con el valor da cada una de ellas,
conquistando el amor y la vida
sin sentir remordimientos,
tuve la razón como cualquiera.
ÁBRETE A LA ESPERANZA.
Ábrete del todo y no encierres nada,
camina con erguida la mirada,
donde la espina te hiera
siembra la planta que te de aroma.
Ábrete y entrega todo, sin límites,
contra espinas,
contra todo,
en busca
de lo que anhelas.
LO QUE QUEDA.
Yo quiero confesar,
mi larga; pero dulce pena,
que no se detuvo ante el hierro,
ni el fuego que quiso quemarla
para convertirla de otra manera.
Yo quiero confesar,
que di sustento a mi vida,
buscando del alma humana
la mano que se extiende,
para dar una caricia,
de la expresión de unos ojos,
que nos hacen una pregunta
o nos dan una respuesta.
Yo quiero confesar y de qué manera
que dura fue;
pero de ella ya nada queda
TODO TIENE SU TIEMPO
A su debido tiempo
pienso en las cosas,
que se han quedado,
para demostrar que el alma
está llena de infinitas cosas,
Saber a veces
las más absurdas e inconclusas,
sentir que late en nosotros
un corazón que aún tiene fuerzas.
Pienso por qué tu nombre,
me llega de tan cerca,
sin añadir por encargo
el alma y la conciencia.
Comprendo la vida como antes,
en la noche y el día,
para hacer que la vida no se detiene.
Existen novedades,
que no pueden explicarse,
porque no brotan las palabras precisas,
para describirlas,
Se nos hace imposible encontrar el valor justo
para cada cosa, cuando no tiene el corazón la
razón que guarda.
Dejo que todo tome la fuerza que ha tenido,
que penetre en el espacio para poder verle,
saber que la vida tiene sus encantos
no declararlo,
es negar por entero que se ha vivido.
CONFESIÓN
Tengo lo necesario,
para comprender que el mañana no vuelve,
que tuvo sus encantos para que ya nada queda,
saberse inquieto y estar tranquilo, vale todo,
se necesita bastante, porque ante la fuerza
que se nos acaba,
Llega lo que no se pierde
porque está la esperanza.
No hago alarde de lo que siento o quiera,
porque el corazón tiene a veces
razones que no se entienden,
hacer que todo tenga un mejor remedio,
es darle lo justo a cada cosa.
NECESIDAD
Que todo tiene que nada falta,
es una necedad,
siempre existe la necesidad de algo,
que se espera,
entonces penetra la imprudencia,
que perturba la luz de cualquier pensamiento.
No se imponen principios
ni se puede detener el tiempo,
la vida pasa y con ella nosotros,
pensemos qué hacemos y cómo actuamos,
así conoceremos,
sobre la base de los errores,
como hemos sido.
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